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Los Hijos del Nopal se ven llegar. Ausentes durante un tiempo, retornan para abrir brechas de sus transtornos mentales y la realidad ausente. Por favor y con calma, pasen a la taquilla para inscripciones, dudas, aclaraciones y alabatorias. Para los inconformes, les espera su torta de tamal por la parte trasera. Gracias....
Reinventando sueños.

*Súbete al tren, el viaje a Ciudad Nopal ha comenzado, distinguido visitante, es hora de la diversión y la chamba pregonera. A tu salud, querida Pencamadre!
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